Propio 23 A + La fiesta + 10.11.20

 


M. Campbell-Langdell

All Santos, Oxnard

(Éxodo 32:1–14 Salmo 106:1–6, 19–23 Filipenses 4:1–9 San Mateo 22:1–14)

Estaba emocionada pero nerviosa cuando llamé a un amigo y compañero esta semana. Su nombre es Darren y es un pastor de Discípulos de Cristo que también es un hombre negro que sirve en una denominación mayoritariamente blanca. También es un artista de rap cristiano que usa el apodo Theo Blue. Y sus videos musicales, incluido uno que él llama "The Same"[1], me han afectado como cristiano y como persona blanca que vive en Estados Unidos.

El trabajo de Theo Blue evoca las profundas diferencias entre la experiencia de los afro americanos o personas de color en los Estados Unidos y la gente blanca en los Estados Unidos. Somos la misma raza humana, pero nuestra experiencia no es la misma. Hay muchas disparidades entre cómo viven nuestros hermanos de color y los hermanos blancos en los EE. UU. ¿Cuán libres nos sentimos cada uno? Cuando un grupo nunca puede escapar del hecho de su piel y otra rara vez parece ser consciente del privilegio que les da su piel, tenemos mucho en lo que trabajar. Y la música de Theo Blue intenta hacer un poco de ese trabajo.

Estaba llamando en parte para alcanzar a un amigo al que respeto mucho, pero también tenía otro motivo. Quería hacer una lluvia de ideas sobre algo. Nuestro grupo local de Clero y Laicos Unidos por la Justicia Económica quiere hacer algo para agregar a la conversación sobre la reconciliación racial. Y pensé ¿qué pasaría si pudiéramos hacer algo usando una pieza de la música de Theo Blue y tener una conversación al respecto? Pero también era consciente de que no quería imponerme demasiado a mi amigo. Así que oré y confío en que la gracia de Dios fue parte de la conversación.

Como persona blanca en Estados Unidos, soy consciente de que tenemos mucho trabajo por hacer en este momento. Para ser franco, es bastante abrumador. Después de siglos de pensar erróneamente, ¿cómo podemos pensar bien? Esto no quiere decir que siempre estemos pensando mal, pero aún queda mucho por hacer. Mi amigo me refirió a un libro llamado White Too Long de Robert P. Jones sobre cómo el cristianismo en Estados Unidos ha apuntalado algunos de los principios de la supremacía blanca. El autor habla de su experiencia en la Iglesia Bautista del Sur, pero sabemos que la Iglesia Episcopal también ha sido cómplice del racismo en su pasado y, a veces, en su presente. ¿Cómo lo hacemos bien para todos los episcopales? ¿Y para todos los estadounidenses, o los de nuestro mundo?

Y luego llegamos a un pasaje como el pasaje de hoy de Mateo, ¡y se nos recuerda que nuestra vida con Jesús es una fiesta! Me suena un poco discordante a la luz de la pandemia y el trabajo en curso sobre la reconciliación racial.

Porque antes de entrar en el otro meollo del asunto, seamos claros. ¡Dios nos está invitando a una fiesta aquí! La vida está destinada a ser alegre, al menos a veces. Y la diversidad de la creación es una parte de esta fiesta. Y se nos pide que aceptemos la invitación de Dios con alegría y abiertamente.

Pero si eres como yo, no siempre eres bueno para decirle "sí" a Dios la primera vez. No siempre te sientes que sea conveniente. Lo que me hace muy agradecido de que, como señaló un comentarista sobre esta lectura, Dios es un Dios que nos sigue invitando.[2] Y me siento humilde al recordar que Dios también sigue invitando a todos, incluso a las personas que posiblemente creemos que no pertenecen a la fiesta. El único requisito es que respondamos a la invitación y vengamos con la vestimenta adecuada.

Bueno, por supuesto que es una metáfora. Esta es una clase de iglesia que proclama “ven cómo eres” y creo en un Dios quien proclama “ven cómo eres”. Pero la verdad es que todos sabemos lo que es presentarse a la fiesta internamente listo y lo que es mostrarse en su ser no listo para la fiesta con Dios. It is one thing to come ready inside to party with God and other to show up schleppy. Y Dios quiere que estemos preparados. Lo cual no siempre es fácil de hacer. Pero Dios seguirá invitándonos. Hasta que estemos listos para dar ese paso en abrazar a la fiesta de la diversidad de Dios.

Esta fue una buena noticia para los israelitas después de que se equivocaron por completo e hicieron un becerro de oro para adorar justo después de que Dios les pidió que adoraran solo a Dios, y Moisés los liberó. Solo tenían que prometer adorar a Dios de ahora en adelante.

Esta es ciertamente una buena noticia para los cristianos blancos en Estados Unidos. Necesitamos aprender a escuchar a los demás. Cómo deleitarse con la diversidad de todo y todos los que Dios ha creado. Y no quedarnos atrapados en quién o qué grupos creemos que vale la pena salvar.

Ahora bien, no te equivocarías si encontraras partes de esta parábola perturbadoras. ¿Por qué un destino tan terrible para el pobre que usa la ropa equivocada? Dicen que la comunidad de Mateo estaba más que un poco traumatizada debido a la destrucción del templo en Jerusalén y otros eventos violentos. Así que necesitamos leer este pasaje con algo de gracia para aquellos que, aunque divinamente inspirados, lo escribieron en medio de su propio dolor. No muy diferente de otras personas ahora que podríamos juzgar cuando parecen tener reacciones más extremas de las que tendríamos debido a un trauma.

Creo que vale la pena repetir las palabras de Pablo a los filipenses al considerar la buena obra de Dios entre nosotros, no solo en la reconciliación racial, sino también en la obra de ser una nación en este momento mientras atravesamos este tiempo de elecciones.

“Por último, hermanos, piensen en todo lo verdadero, en todo lo que es digno de respeto, en todo lo recto, en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo que tiene buena fama. Piensen en toda clase de virtudes, en todo lo que merece alabanza. Sigan practicando lo que les enseñé y las instrucciones que les di, lo que me oyeron decir y lo que me vieron hacer: háganlo así y el Dios de paz estará con ustedes.”

Que el Dios de paz sea con Ustedes, no importa cómo están invitados a festejar con Dios. Y ¡que todos abrazamos la diversidad asombrosa de le creación de Dios mientras nos unimos a la fiesta!



[2] Rolf Jacobson, Karoline Lewis, Joy J Moore and Matt Skinner, “Working Preacher Sermon Brainwave Podcast #746- Nineteenth Sunday after Pentecost,” para el 11 de octubre 2020, se encuentra en: https://www.workingpreacher.org/brainwave.aspx?podcast_id=1302.

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